Un llamamiento a la torcida conducta carnal
Cuando la comunidad de nuestra iglesia se vino abajo, pensé que nada podría volver a restaurarla. Pero luego Mac murió.
Cuando la comunidad de nuestra iglesia se vino abajo, pensé que nada podría volver a restaurarla. Pero luego Mac murió.
La fe y las finanzas están entrelazadas. No podemos mantener nuestro dinero fuera de la mano de Dios.
La intención de Dios es que su pueblo sea responsable unos con otros.
La confianza no se desarrolla en la perfección; se desarrolla en el fracaso.
En medio de la tensión política de Ucrania, una pareja se aferra a lo que conoce: la hospitalidad y la confianza en Dios.
La Biblia nos exhorta una y otra vez a no tener miedo por nada, pero muchos creyentes dejan que el temor domine sus vidas.
¿Por qué nos sorprenden las fallas en el cuerpo de Cristo?
Hay muchos factores que nos dividen en la sociedad contemporánea: la educación, la clase social, el género y la raza. Pero todos resultamos siendo perdedores hasta que aprendemos a conocernos unos a ...
"¡Cuán innumerables son tus obras, oh Jehová!
Hiciste todas ellas con sabiduría;
La tierra está llena de tus beneficios. He allí el grande y anchuroso mar,
En donde se mueven seres innumerables,
Seres pequeños y grandes". —
Salmo 104. 24, 25
"Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán;
Me conducirán a tu santo monte,
Y a tus moradas. Entraré al altar de Dios,
Al Dios de mi alegría y de mi gozo;
Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío".
Salmo 43.3, 4
"Alabad a Jehová desde los cielos; Alabadle en las alturas. Alabadle, vosotros todos sus ángeles; Alabadle, vosotros todos sus ejércitos. Alabadle, sol y luna; Alabadle, vosotras todas, lucientes estrellas. Alabadle, cielos de los cielos, Y las aguas que están sobre los cielos. Alaben el nombre de Jehová; Porque él mandó, y fueron creados". - Salmo 148.1-5
“Vosotros, ¿quién decís que soy yo?”. El Señor Jesús le planteó esa pregunta a sus discípulos, la cual sigue ...
Un recién nacido envuelto en pañales, pastores cubiertos del polvo de los prados, una María radiante y un ...
En el fondo, nos mantenemos a salvo, no por nuestras cercas, sino por Aquel que las creó.