¿Alguna vez ha intentado compartir su testimonio? Quizás no sabía por dónde empezar o qué decir. Trate de pensarlo de esta manera: solo está contando la historia de lo que Jesucristo ha hecho en su vida, y dejando que otros sepan cómo seguirlo.
Para testificar de manera efectiva, es útil decir más que: “Usted es salvo cuando recibe al Señor Jesús como Salvador”. La gente aprecia la claridad sobre el camino real hacia la salvación. Por eso es bueno describir quién es Jesucristo y explicar las creencias específicas que traen el perdón de los pecados y que les harán parte de la familia de Dios.
Sin duda alguna, una persona puede ser salva sin entender por completo el papel de la cruz. Sin embargo, los nuevos creyentes inician su camino espiritual desde una base más firme si comprenden el significado del sacrificio expiatorio de Cristo.
Ore por oportunidades para compartir la buena noticia. Dios puede llevarle a conversar con personas que saben poco acerca de Cristo, y usted podría ser la única persona que ellas conozcan con un verdadero conocimiento del Señor. Aunque no acepten la verdad de inmediato, su testimonio puede sembrar una semilla (1 Co 3.6-8). Pida a Dios valor para hablar de lo que ha hecho en su vida, y salga a hacer discípulos con amor y confianza.
BIBLIA EN UN AÑO: EZEQUIEL 37-39