Historias de Fe
Jamás una víctima
Después de superar el cáncer, a Pam le resultaba difícil aceptar un nuevo diagnóstico. Aunque no ve todo lo que Dios ve, está aprendiendo a confiar en lo que Él quiere para su vida.
El hijo de Cindy tenía una adicción a las drogas que lo paralizaba. Las consecuencias arruinaron la situación económica de Cindy y casi le quita la vida. Cuando estaba en el peor momento, Dios le dio esperanza. Con el poder de Cristo, ahora madre e hijo luchan juntos.
11 de mayo de 2025