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En mi visor: Nueva Zelanda

Reflexiones acerca de las fotos de Charles F. Stanley

Amanda Crosby 1 de noviembre de 2021

Fotografía por Charles F. Stanley
En esta tranquila escena, una corriente de agua fluye con calma; su tono es de un verde intenso que refleja las hojas color esmeralda de los árboles que se elevan por encima de ella. Estos árboles que bordean el arroyo se han vuelto altos y poderosos, y sus sustanciosas y enredadas ráces se extienden a través de la orilla del arroyo. Al descender a las profundidades invisibles del agua, las ráces extraen alimento y vida. Todo es tan sereno y relajante, pero no puedo evitar preguntarme qué pasaría si llegara una tormenta o se produjera una sequía.

La fotografía me recuerda una imagen del libro de Jeremías:

"Bendito es el hombre que confía en el Señor,  cuya confianza es el Señor. Será como árbol plantado junto al agua, que extiende sus ráces junto a la corriente; no temerá cuando venga el calor, y sus hojas estarán verdes; en año de sequía no se angustiará ni cesará de dar fruto." (Jeremías 17.7, 8 LBLA).

Esta imagen es un hermoso recordatorio de una verdad importante: así como a esas ráces les tomó llegar a las profundidades del agua, se necesita paciencia y perseverancia para que nuestras ráces crezcan fuertes en el Señor, lo que nos permite enfrentar las grandes pruebas de buen modo. Como dice Jeremías 17.7, la persona que confía en el Señor es bendita. El mundo puede fallarnos, pero podemos tener la confianza de que las promesas de Dios serán verdaderas para siempre.

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